En sus más de diez años como criador, Shiyuhe de la aldea de Henan en la provincia de Shandong, China, afirmó que nunca había visto un ternero así. Además de la peculiaridad del ternero, decidió comprarlo por 200 yuanes.
Actualmente, Shiyuhe gasta una media de £6 adicionales al día en leche para el entrañable animal. A pesar de sus características físicas anormales, también tiene la intención de criarlo hasta la madurez.
Debido a que el ternero tiene sólo dos patas, se parece a un marsupial. Shiyuhe afirmó que todavía no puede caminar y que no está seguro de cómo instruirlo.
“Lo conservaré mientras esté vivo”, confirmó Shiyuhe.
Además de su distintiva apariencia, el ternero se ha convertido en el principal tema de conversación en la aldea de Henan donde vive Shiyuhe. Numerosas personas han viajado a Irán para ver al potro. Los hijos de Shiyuhe parecen estar fascinados por el animal, ya que con frecuencia lo alimentan en su recinto.
Wang añadió: “Lo conservaré mientras dure porque es duradero”.
Los residentes de la aldea de Wang han acudido en masa para ver el peculiar ternero, que se ha convertido en la comidilla de la ciudad.
El hecho de que sus hijos ayuden a alimentar al animal con biberón en el granero indica que a ellos también les gusta.